El Sporting volverá a encontrarse con Estrada Fernández en un partido clave en la lucha por la permanencia en Primera División. De la misma forma que sucedió la pasada temporada, en la importante visita al Granada, el colegiado catalán será el encargado de pitar en otro encuentro vital para los gijoneses, el que espera la próxima semana, en Leganés. Una designación que ha destapado ciertas susceptibilidades apoyadas en al discutida actuación que tuvo durante aquel polémico encuntro en Los Cármenes, el mismo que hizo que Abelardo estallara y se expresara con dureza respecto a la actuación arbitral.

"Me siento robado. Y ahora, que me metan cincuenta partidos", clamó el Pitu tras la visita al Granada de la temporada pasada. Y es que Estrada Fernández tuvo dos graves errores que condicionaron el partido. Primero, al anular un gol legal a Sanabria que hubiera supuesto el 0-1, y después al pitar un penalti inexistente de Mascarell sobre Barral que abrió la victoria de los nazaríes, que se impusieron por 2-0.