"Hemos merecido ganar", afirmó Burgui tras el partido. El rojiblanco fue el protagonista de las dos acciones más polémicas del partido. Un fuera de juego inexistente pitado por Gil Manzano, y un posible penalti que el árbitro no vio. "Me voy cabreado, muy triste. El árbitro es extremeño, lo conozco, y se ha equivocado en un partido clave. Él sabe que ha fallado", subrayó. "Espero que ante el Espanyol El Molinón esté lleno para ponernos a un punto. Es la última final", concluyó en zona mixta.