La fórmula de gestión de los campos de fútbol base gijonés de propiedad municipal ha sido tema de debate durante los últimos años. El Ayuntamiento pretende reordenar su uso a partir de la próxima temporada, tras las reiteradas quejas de equipos que se ven agraviados por no tener acceso a ellas y denuncian el abuso de alquileres a terceros. Por ello, se ha comenzado a organizar un nuevo protocolo. Entre las novedades, los ocho clubes a los que el Ayuntamiento tiene cedido este tipo de terrenos (Arenal, Llano 2000, La Braña, Manuel Rubio, Montevil, Lloreda -que lo comparte con el Veriña-, Camocha y Roces) deberán informar de sus horarios antes de iniciar la campaña, estarán obligados a ceder un mínimo de horas a otros conjuntos gijoneses y se unificarán precios a la hora de alquilar.

El Ayuntamiento quiere acercar los campos municipales más allá de los clubes que disfrutan de su cesión. La idea es que estos equipos informen de su cuadrante de horarios, teniendo en cuenta solamente la actividad de sus equipos, y a partir de ahí ir completando huecos con otros conjuntos de la ciudad. En este apartado se contempla fijar un mínimo obligatorio de horas libres y sólo los que fomenten el fútbol femenino, con un equipo de estas características, al menos, en su entidad, podrán evitar esta condición. Esta es una de las fórmulas para evitar que se abuse de los alquileres a terceros.

Los cambios también implican que, cuando se acuerde el arrendamiento de un campo municipal, se habilitará una tarifa especial para entidades gijonesas, menor que para el resto de usuarios. Toda esta problemática ya fue abordada en el pleno municipal y las nuevas medidas ya se comenzaron a debatir con los clubes implicados esta misma semana.