Estaba cantado que la noticia se prestaría al chiste fácil. Y es que según se ha conocido, parece ser que el Sporting es el primer club en disposición de estudiar el pie de sus futbolistas en tres dimensiones. A partir de estos estudios personalizados, se podrán así diseñar las botas de manera individualizada para cada jugador. Y claro, la duda que ahora surge es si de haber dispuesto la temporada pasada de esta novedosa tecnología, algún remate inverosímilmente fallido, hubiese sido gol. O incluso, llegado el caso, si el nuevo 'juguete' de los servicios médicos del Sporting, hubiese servido para detectar de antemano a más de un supuesto fichaje 'top', que a la postre se descubrió como un triste 'tuercebotas'. Triste pero muy caro, todo sea dicho.

Al menos a mí, me resulta curioso que el año que descendemos a Segunda, nos encontremos primero con el anuncio de que el club ha adquirido una máquina para simular lanzamientos de falta, de cara al entrenamiento de los porteros y que ahora, nos encontremos también con esta historia de la tecnología que me he permitido en bautizar como ATB (Anti Tuerce Botas).

Por supuesto que bienvenido sea, todo lo que pueda servir para mejorar cualquier aspecto susceptible de mejora. Y esto ni qué decir que es extensible también al ámbito no deportivo. Precisamente, a falta de fichajes para la primera plantilla, también se han conocido este lunes los nombres de tres nuevos fichajes, que pasan a incrementar la nómina de personal no deportivo en el club (una lista que por cierto, no es que precisamente fuera corta). En concreto son tres jóvenes que trabajarán dentro del departamento de comunicación, dedicados fundamentalmente al mantenimiento de dicha comunicación en las redes sociales. Todo muy bonito (muchos aficionados ya están elogiando la mejoría en este sentido que ha dado el club), pero veremos lo que dura el 'buen rollito' si la pelota no entra o si los resultados no llegan. Les deseo por ello a estos nuevos miembros del club, la mejor de las suertes; porque la van a necesitar. Y paciencia; porque ya sabemos lo que anda suelto por esas redes.

Espero en todo caso, que quienes deberían siempre dar la cara, no se escuden ahora tras esa mayor interacción que se pretende lograr con el aficionado desde las redes sociales. Sin ir más lejos, desconozco el motivo por el que Jorge Meré, en su rueda de prensa de despedida (o de 'hasta luego', si bien me inclino más por lo primero), no estuvo acompañado por nadie del club. Agradecería si alguno de los tres simpáticos jóvenes recién aterrizados a Mareo, leyera estas líneas, nos aclarara si fue por decisión del jugador o si es que nadie quiso posar para esa incómoda foto, aunque fuera con unos folios en blanco delante.

Queridos sportinguistas y sportinguistos (que yo también sé ponerme simpático si me lo propongo, aunque otra cosa es que se me dé fatal y más en estas circunstancias): ni anuncios de camisetas sacadas de un catálogo de saldos, ni de máquinas lanzabalones o detecta 'tuercebotas', ni presentaciones de más comunicadores que nos tengan entretenidos (amén espero que informados). Lo que la afición reclama son noticias de fichajes de carne y hueso, para una plantilla que con el primer partido de pretemporada a las puertas, hace aguas por todas partes, aunque quizás haya quien siga creyendo (y más después de las llegadas de Bergantiños y Scepovic), que el equipo está "bastante hecho".

Post Scriptum: ¿siguen en el club convencidos de que se alcanzará la cifra de 20 mil abonados, o comienza a existir una cierta intranquilidad al respecto?