"Si las piernas no estuvieran cargadas a estas alturas tendría que preocuparme". David Chorro, preparador físico del Sporting, elevó hoy el ritmo de trabajo. El conjunto rojiblanco abandonó Mareo para protagonizar una de las jornadas más duras de la pretemporada. El equipo se pegó una paliza física por las cuestas de la senda del Cervigón, y terminó con más ejercicios de fuerza en el arenal de la playa de La Ñora.

"El fútbol no es un deporte de picos de forma. Tan importante es ganar la primera jornada como la última", señaló David Chorro, que quiere que el Sporting empiece "fresco" la temporada y "mantenga el nivel" a lo largo de la campaña. El preparador físico no pudo contar con la presencia de los tres jugadores que arrastran molestias, Babin, Castro y Pelayo, que se quedaron trabajando en Mareo.