"Me gusta ser emotivo con mis jugadores. Lo más importante son los tres puntos, pero hay algo más por detrás, nuestra gente, y ahí hay que hacer hincapié". Paco Herrera, entrenador del Sporting, quiere tocar la fibra de sus futbolistas y del sportinguismo ante la visita del Oviedo, esta tarde, a El Molinón. "Hay que hacer un esfuerzo del 120%. El 100% lo tenemos que dar todos los partidos, pero ese otro 20% tiene que ser para nuestra gente. Posiblemente ese extra es el que te dé la victoria. Somos los números uno, los mejores en afición. El fútbol ya lo tienen mis jugadores y sé que lo van a dar", enfatiza el técnico del conjunto rojiblanco.

"En un derbi no hay favoritos, te ayuda a ponerte en tu sitio. Va a ser un partido reñido y espero que con buen fútbol", afirma Herrera. El entrenador del Sporting da una imagen de aparente tranquilidad que desea trasladar a su vestuario. "Tenemos que manejar que la sobreexcitación no juegue en nuestra contra", comenta tras justificar haber realizado el entrenamiento de ayer a puerta cerrada, el segundo de la semana sin público, cuando normalmente sólo lo hace una vez a la semana. "Entrenar en Mareo hubiera sido una pequeña locura y quería abstraer a la gente de eso", explica.

"Leía esta semana que un derbi es como un play-off, y puede ser. Hay que jugarlo, pero sobre todo, ganarlo", apunta el preparador de los gijoneses ante esa tensión añadida que tiene el encuentro. "Lo que importa es lo que suceda de la raya para adentro y ahí somos muy buenos", enfatiza. Herrera reconoce que repetir el once que goleó en Tarragona "es una posibilidad" y juega al despiste reservándose la opción de hacer un cambio, "como mucho". Cree que los dos equipos han iniciado bien la Liga, pero dice que queda todavía por ver lo mejor de ambos. "Como a todos los que tenemos seis o siete cambios en la plantilla, nos falta un poquito. Estamos creciendo y el Oviedo también está en esa fase. Han hecho una gran plantilla. Van a estar arriba, como nosotros", comenta.

"Este derbi tiene muchas similitudes al que vi tres años en Vigo entre Celta y Dépor", dice Herrera. "Hay mucha rivalidad, y dentro de ella hay un apartado buenísimo, de un 90% y un 10%, que se sale de madre y hay que evitar. Espero que haya deportividad. Ojalá ascendamos los dos. Lo repito, y cada vez lo digo más alto. Para Asturias sería maravilloso", destaca. El técnico rojiblanco da alguna clave sobre el rival. "El Oviedo se recoge muy bien y necesita pocos pases para proyectarse en ataque. Roban el balón y con un solo pase ponen a Toché en jugada de gol. Me preocupa, pero no condicionará nuestro estilo de juego. Eso no lo vamos a negociar", sentencia. Por último, el preparador de los gijoneses desvela su buena relación con Anquela. "Somos amigos del fútbol. Tiene un mayor porcentaje de victorias sobre mí, aunque, a final de temporada, normalmente suelo quedar por encima en la clasificación. Bromeamos con eso. Le deseo lo mejor. Es una persona y un entrenador que vale la pena", concluye.