La mala imagen ofrecida en Pamplona ha venido a confirmar que la herida por la que sangra el sportinguismo es más profunda de lo que parecía inicialmente, que más que un accidente, partidos como los de Soria o Pamplona, son un síntoma de que algo no va bien en el equipo. Paco Herrera quiso tomar cartas en el asunto. La primera imagen de su equipo, tras ser superado por Osasuna, que tuvieron los seguidores del Sporting congregados en Mareo fue la de una charla del técnico con sus futbolistas. Un gesto público que trascendió de las paredes del vestuario y que tuvo lugar sobre el césped del campo número 2 de Mareo, en el que se entrena habitualmente el Sporting.

Herrera habló alto y claro a sus jugadores. Las cámaras de la TPA capturaron parte de esa charla y la emitieron en el informativo subtitulada. Según el canal, Herrera, en un momento de su apelación a los futbolistas, habría reprochado la actitud de algunos futbolistas que no van de verdad a las disputas y a la presión. "No lo hacemos de verdad. Hacemos que vamos y creemos que engañamos. Lo estamos viendo, yo lo veo. Eso es de cobardes, nos está dejando tirados por no hacer el esfuerzo para el grupo", increpó el entrenador, que se dirigió al colectivo y evitó señalar a ningún futbolista en concreto.

Tras este duro mensaje, Paco Herrera quiso también enviar un discurso tranquilizador: "Esas situaciones son las que me ayudan. Y si somos capaces de empezar a corregir eso, todo lo demás saldrá...".

Éste es el fragmento de la "Herrerina" dedicada por el técnico que pudieron captar las cámaras del canal autonómico. Queda claro el tono duro del mensaje del entrenador. Y queda de manifiesto también que Paco Herrera no está satisfecho con la implicación de algunos de sus futbolistas. Resulta significativo que el entrenador haya querido tener esta conversación en público.

La jornada de terapia no terminó ahí. Los futbolistas quedaron concentrados en Mareo tras el entrenamiento, donde comieron todos juntos y descansaron. Aunque no estaba programada una sesión vespertina, Herrera y sus auxiliares aprovecharon para mantener diferentes conversaciones individuales con algunos futbolistas.

Tras la "Herrerina" sobre el césped, el equipo se entrenó con mucha intensidad. Los futbolistas completaron un ejercicio de presión y circulación de balón. En el tramo final del entrenamiento, los que habían disputado más minutos el fin de semana (incluidos Nacho Méndez y Pedro Díaz, que jugaron con el filial) y Lora se retiraron al gimnasio, mientras que el resto disputaron un partido a campo reducido.

La sesión transcurrió con caras largas y mucho silencio, que se rompía únicamente por la voz cascada de Paco Herrera y sus indicaciones. A pesar del mal momento del equipo, se congregó un número significativo de aficionados en la escuela de fútbol que recibieron al equipo con indiferencia, ni protestas ni apoyo. Los aficionados fueron meros testigos de lo que sucedía sobre el césped.

Está claro que el Sporting necesita con urgencia dar un giro a su trayectoria. Todo apunta a que Paco Herrera podría introducir algunos cambios en el equipo titular ante el Sevilla Atlético. Una posibilidad es que Nacho Méndez regrese al primer equipo para ganar la creación del juego en el centro del campo.