¿Lo hizo intencionadamente o fue pura potra? Es lo que se preguntaron los seguidores del Lugo y muchos del Sporting después de que Juan Carlos, guardameta del equipo lucense, les dejase con la boca abierta tras marcar un gol desde su propio campo. El portero chutó desde más de sesenta metros y el balón entró muy ajustado tras superar a Mariño, que estaba adelantado.

"Ha sido un churro", reconoció Juan Carlos tras el partido en los micrófonos de Gol TV. "Intentaba simplemente meter el balón al área y me salió así", explicó el guardameta, que, además, celebraba en el día de hoy su cumpleaños.

Su tanto, el del definitivo 3 a 1, supuso la puntilla para un Sporting que mereció más en el estadio Anxo Carro.