El Sporting tiene en estos momentos el título de equipo más limpio de la categoría. Con 45 amarillas y una roja en 26 partidos los rojiblancos encabezan la clasificación del juego limpio. Carlos Castro, en el partido ante el Numancia de la primera vuelta, y por pegar una patada a destiempo a un rival, ha sido el único expulsado del Sporting en lo que va de Liga. Los rojiblancos han cometido hasta la fecha 397 faltas y han recibido 365.

En el lado opuesto en esta clasificación de amonestaciones se sitúa el Oviedo, que es el equipo que más tarjetas acumula de todo el fútbol profesional (Primera y Segunda División). Después de 26 jornadas disputadas, los azules han visto 80 tarjetas (77 amarillas y 3 rojas), casi el doble que el Sporting, según datos extraídos del portal estadístico Opta.

El Sporting sale a una media de 1,7 tarjetas por encuentro. El jugador que más veces ha sido sancionado es Calavera, con seis amarillas, y seguido de Barba y Carmona, los otros dos jugadores que ya han cumplido un partido de sanción. Detrás de ellos se sitúa Santos, que tiene cuatro, y está apercibido, mientras que Álex Pérez, Isma López, Lora y Álex Bergantiños tienen tres tarjetas amarillas.

Además del Sporting, los equipos con menos cartulinas son el Reus (46), el Córdoba (52) y el Cádiz (53). Mientras que en el lado opuesto, junto al Oviedo, que sale a una media de tres amonestaciones por partido, están el Sevilla Atlético, (79), el Osasuna (77) y el Nàstic de Tarragona (76).

La circunstancia de que el Sporting sea el equipo con menos tarjetas tiene un arma de doble fijo. Por un lado se valora el buen comportamiento y se desvían las quejas hacia el estamento arbitral. Pero por otro se reavivan algunas de las críticas de este curso al equipo, al que se le reprochó falta de intensidad y disputa en algunos lances del juego en varios partidos de este año.