Rubén Baraja cumple dos meses en el banquillo del Sporting con un patrón que empieza a definirse en cuanto a nombres y estilo. El entrenador rojiblanco ha aprovechado los ocho partidos que ha dirigido hasta el momento para ir dando forma al conjunto con el que pretende alcanzar el objetivo del ascenso. 24 son los futbolistas que han disfrutado de minutos durante esta etapa, siendo Mariño, Álex Pérez, Bergantiños, Santos y Carmona -baja por sanción para el encuentro de mañana en Lorca (Artés Carrasco, 20.00 horas)- los únicos en ser titulares en todos ellos. Son los pilares de un Sporting según la estadística, pero para completar la estructura hay que añadir otros tres nombres: Sergio y Barba han sido titulares siempre que han estado disponibles y Jony ha aumentado su presencia a partir de su llegada en el mercado invernal hasta convertirse en indiscutible.
Ocho nombres son muchos cuando se habla del equipo titular de un club de fútbol y Rubén Baraja ya tiene a los suyos. Los números reflejan la estabilidad que el Pipo ha tratado de encontrar a través de dar confianza a un mismo bloque de jugadores. Se podría decir que las otras tres plazas para completar el once han servido para ir cubriendo las bajas que han ido produciéndose con motivo de sanción y lesión, y alguna mínima variante técnica en función del momento o del rival. En cualquier caso, llama la atención que entre este aspecto y los futbolistas que participaron tras haber iniciado los encuentros como suplentes, al vallisoletano le haya dado tiempo para emplear a hasta dos docenas de futbolistas. Y los que quedan.
La influencia de que Baraja aterrizara en el club semanas antes de que se abriera el mercado de invierno es otra de las variables a tener en cuenta a la hora de juzgar la lista de futbolistas que ha introducido durante los choques ante Tenerife, Granada, Córdoba, Alcorcón, Lugo, Nàstic, Oviedo y Numancia. Tres de ellos ya no están en la disciplina rojiblanca, como son los casos de Moi Gómez, Scepovic y Xandao, ya que cambiaron de aires en el mes de enero junto a Rachid, que no dispuso de minutos con el Pipo. Por contra, han llegado otras cuatro caras nuevas: Jony, Nano Mesa, Hernán Santana y Guitián, que, paulatinamente, han ido ganando presencia a pesar de que los tres últimos aterrizaron en Gijón durante la última semana del primer mes del año. De hecho, Moi Gómez y Scepovic han jugado más con el Pipo que todos ellos.
Los que son intocables son Diego Mariño y Álex Pérez. Ambos pueden presumir de haber jugados todos los minutos con Rubén Baraja. Bergantiños, Carmona y Santos han ido teniendo momentos de respiro, puntuales, a lo largo de esas ocho jornadas en forma de sustituciones. Barba y Sergio, por su parte, también pertenecen a ese grupo de privilegiados por haber disputado todos los minutos en los seis partidos que estuvieron disponibles. El avilesino se perdió, por lesión, los dos primeros encuentros dirigidos por el Pipo. A partir de ahí, ha sido inamovible. El central italiano, por su parte, se cayó de la convocatoria para Lugo a última hora, por un problema vírico y no pudo participar la pasada jornada al tener que cumplir sanción por acumulación de amarillas. El resto, un fijo.
Los que siguen esperando por su oportunidad son otros cuatro jugadores de la primera plantilla. Whalley, Lora, Quintero y Álex López han estado disponibles con el Pipo y ninguno ha podido aportar desde dentro del terreno de juego. Hay otros dos casos que, aunque aparecen entre la lista de jugadores que han contado para el entrenador, su presencia ha sido prácticamente testimonial. Pablo Pérez apenas ha jugado media hora y Borja Viguera, diez minutos. Quedan 16 jornadas por delante para que esta tónica cambie o se encuentren nuevos protagonistas en la pelea por el ascenso entre los jugadores del filial que pelean por un sitio. Adri Montoro ya debutó a las órdenes del vallisoletano como solución a la carencia de efectivos en el lateral derecho. El canterano Nacho Méndez también ha tenido minutos, siendo titular en los dos primeros encuentros del técnico rojiblanco.
