Nano Mesa, que había sido duda hasta última hora por sus problemas en el tobillo izquierdo, duró apenas veinticinco minutos sobre el campo. Tiempo suficiente para forzar un penalti en el que recibió una dura entrada de Digard. El central impactó de lleno sobre el dolorido tobillo del delantero canario, que abandonó el terreno de juego en camilla. Nano Mesa está pendiente de exploración médica para valorar el estado de su tobillo y ver si está en condiciones para el choque del próximo fin de semana ante Osasuna.