"Lo de la playa ya lo había hecho más veces. Era una persona amable que estaba acostumbrada a ayudar. No era la primera vez. También ayudó en accidentes de trafico o una vez a la salida del colegio a un niño que le había dado un ataque epiléptico junto a su abuelo". Blanca Cobián, viuda de Jesús Castro, mostró ayer su alegría por el reconocimiento a la figura del mítico portero rojiblanco, ya no solo por el ámbito deportivo y sus 18 años en el club, sino también por reconocer "sus valores humanos" y sus otras ejemplos de ayuda desinteresada, antes de que su vida se apagase en Cantabria, casi en el límite con Asturias.

El guardameta rojiblanco falleció hace 25 años en la playa de Pechón mientras intentaba rescatar a dos niños fue recibida en el Ayuntamiento de Gijón, en un acto en el que el concejal del Deportes, Jesús Martínez Salvador, garantizó el proyecto de que la puerta 1 lleve su nombre sale adelante y que en las próximas semanas se conocerán más detalles.

La viuda de Jesús Castro reconoció que "su muerte fue una tragedia, algo muy duro para nosotros" y añadió que en las últimas semanas han recibido el cariño de muchos aficionados. "He sentido mil emociones con el apoyo de la gente para puerta 1 de El Molinón. Nos ha desbordado todo esto, hemos llorado y nos hemos también alegrado por el buen recuerdo entre la afición. Estamos muy ilusionados, es una alegría vivir esto dentro de la tristeza que es que no esté aquí él en estos momentos", añadió la viuda del portero.

Hace menos de dos semanas que se lanzó la iniciativa para que Castro tenga su rincón especial en El Molinón. Y la unanimidad ha reinado en este tiempo entre el ámbito político y social. "La idea surgió de mis hijos, por los valores que significo su padre para ellos, era una persona recta, discreta y muy familiar", recordó Cobián. "Castro para mí era un castillo que se derrumbó. Se acabo todo con 42 años y con una vida por delante", añadió.

Muy cerca de Blanca Cobián seguía su relato Quini, con mucha emoción, y recordando también el tiempo en que ambos coincidieron vistiendo la camiseta del Sporting. "Por mis nietos me encantaría que pongan a esa puerta de El Molinón el nombre de Castro, porque ellos no tuvieron la suerte de conocer a su abuelo, únicamente por lo que les van contando", destacó la viuda del guardameta.

El acto en el Ayuntamiento de Gijón sirvió para reconocer su figura y premiar a los impulsores de esta iniciativa. Junto a la viuda estuvieron Alberto Estrada y Luis Pereda, presidente de la Peña Inter (que cada año hacen una ofrenda en verano en el monolito de recuerdo al meta en Pechón). Y también acudió Fernando Losada en nombre del Sporting. "Es un proyecto muy especial para nosotros por lo que supone para el sportinguismo, recuperar una serie de valores, como los que encarnaba Jesús Castro", señaló el consejero.