El día de su presentación con el Sporting, Miguel Torrecilla presentaba a Álex López como "un centrocampista ofensivo, de buen trato de balón y que siempre busca pases hacia adelante en buenas condiciones". Apuraba por aquel entonces el mes de agosto sus últimos días, era la previa del segundo partido de liga, y el medio gallego se ofrecía para jugar ante el Lugo. Aunque hubo esperar a la tercera jornada para ver el debut de Álex López de rojiblanco. Sin embargo sus apariciones fueron fugaces, y apenas participó en cinco partidos de liga y dos de Copa del Rey. El último partido que Álex López jugó con el Sporting fue justo hace una vuelta ya, en Pamplona, en la visita a Osasuna, donde el Sporting cayó 2-0 y el ferrolano fue titular.

Tras aquel partido Álex López sufrió una lumbalgia aguda, provocada por un problema ciático, que le ha apartado de las alineaciones y las convocatorias. Ahora el centrocampista gallego participa en los entrenamientos con normalidad con el resto de la plantilla, pero tiene difícil dar paso hacia adelante para jugar, y más tras la llegada de Santana en el mercado invernal. Una vuelta alejado de los terrenos de juego dejan a Álex López en una situación peculiar, y al Sporting con un efectivo del centro del campo que no ha podido aprovechar esta temporada.

El ferrolano debutó en la tercera jornada en la visita al Nástic en Tarragona, un partido en el que disputó 17 minutos. Tras esa cita disputó entre semana el partido completo de Copa del Rey en Reus y tres días después salió en el tramo final del derbi ante el Oviedo para disponer de seis minutos, instantes antes del empate de Toché. En Soria jugó la segunda mitad al completo la jornada siguiente, ante el Lorca fue titular en EL Molinón en la sexta jornada y fue sustituido a los 57 minutos, y entre medias disputó el partido completo y también la prórroga del duelo de Copa ante el Numancia. Y en Pamplona en la octava jornada jugó el partido completo.

La pubalgia truncó la adaptación de Álex López, que disputó sus cinco partidos de liga de forma consecutiva entre la tercera y la séptima jornada. El futbolista gallego llegó a Gijón por petición expresa de Paco Herrera, que ya lo conocía de su paso por el Celta de Vigo y el Valladolid, equipo éste último con el que jugó la temporada pasada tras desvincularse del conjunto celeste.

Álex López venía a aportar el papel de centrocampista creativo y experimentado, ya que tenía en su bagaje en Primera con el Celta de 89 partidos, a lo que sumaba los partidos en Vigo y Valladolid en Segunda para alcanzar los 110 partidos en Segunda.

A sus 30 años se encuentra en una situación muy delicada, sin continuidad en el juego, con una lesión que le ha dado un quebradero de cabeza importante durante todo el año, y de la que se desconocen las secuelas que le puede haber dejado para el futuro. Lo que sí es cierto es que ahora mismo Álex López tiene muy complicado jugar hasta final de temporada, bien por su estado de forma, y también porque por delante tiene a cuatro jugadores para actuar en su misma posición: Sergio, Álex Bergantiños, Hernán Santana y Nacho Méndez.