En un partido solventado con un resultado un tanto abultado y que pudiera llevar a engaño a quien no lo hubiese visto, el Sporting se coloca líder provisional. Podríamos añadir que provisional y circunstancial, habida cuenta de que al Huesca, equipo que junto con el Rayo cuenta con los mismos puntos que el Sporting (58), le queda un partido por disputar a priori muy favorable. Aunque en esta Segunda cada jornada está más claro que nunca se puede cantar victoria antes de tiempo.

No lo hizo el Sporting en el Almería, saliendo muy centrado al encuentro y buscando desde el primer instante ponerse por delante en el marcador. Pudo ser casi al inicio de no marrar entre Rubén García, Santos y Jony una ocasión clarísima de las que muchas veces luego uno se arrepiente.

Apenas dos minutos después el Almería dio su primer aviso con un lanzamiento al palo y cuyo rechace no supo ser tampoco aprovechado por los andaluces.

Pero el Sporting no estaba para sorpresas y no se había llegado al minuto 10 cuando Rubén García filtra un pase extraordinario para Santos, que bate por entre las piernas al guardameta local.

Quiso reaccionar el Almería, pero sin apenas crear peligro, más allá de alguna jugada muy puntual. El partido lo tenía controlado el Sporting hasta que en el minuto 35 llegó la que sin duda ha sido la peor noticia del partido: la lesión de Santos. Habrá que esperar a las pruebas pertinentes para determinar el alcance de la misma.

Lo que resulta indiscutible como se pudo ver durante gran parte de la segunda parte es que este Sporting sin Santos pierde un referente que a día de hoy, no parece tener sustituto en la plantilla.

Pudo llegarse al descanso con una mayor ventaja si el colegiado hubiese señalado lo que pareció un claro penalti sobre Rubén García. Prefirió inhibirse como hizo también con otros dos reclamados por el equipo de Lucas Alcaraz durante el segundo tiempo, y cuando el marcador aún señalaba un inquietante y minúsculo 0-1. Fue sin embargo a pitar el que de todos los posibles, menos lo fue. Eso sí: lo hizo cuando el partido estaba más que resuelto. De lo contrario difícilmente se hubiese atrevido a señalarlo. Ese gol del Almería en el descuento y que puso el 1-3 final en el marcador, fue la otra nota negativa del partido: el fin de la imbatibilidad de Mariño.

Antes de eso el Sporting tuvo que pelear lo suyo durante casi todo el segundo periodo, donde no se le vio muy fino. Sufrió además una infinidad de saques de esquina por parte del Almería, aunque bien es verdad que supo resolverlos con autoridad. La pareja de centrales Guitián Alex Pérez por la que finalmente se decantó Baraja, respondió con nota a la confianza depositada por el míster. Luego ya en los minutos finales, con Barba sustituyendo a un amonestado Canella (otra vez a un gran nivel), el equipo se hizo aún más poderoso defendiendo las jugadas a balón parado.

Quien fue también amonestado, aunque era algo que se sabía que buscaría, fue Sergio. El avilesino cumplirá de este modo un partido de sanción ante el Reus por acumulación de tarjetas y llegará ´limpio´ a los partidos de Valladolid y Cádiz. Son dos serias bajas (la suya y la de Santos) que habrá que ver cómo resuelve Baraja. Tiene una semana por delante para pensar en ello.

No fue el de los Juegos del Mediterráneo el mejor partido para Jony, como él mismo reconoció tras el partido. Sin embargo, cuando más lo necesitaba el equipo, el cangués apareció para robar un balón, entrar por su banda y ceder a placer a Santana para que el canario, que había entrado sustituyendo a Rubén García, lograra marcar su primer gol con la camiseta del Sporting.

A punto de llegar al minuto 80 y casi en la primera jugada de peligro de que disponía en todo el segundo tiempo, el Sporting dejaba de este modo visto para sentencia el partido.

Pero aún hubo tiempo para que llegara el tercero, obra precisamente de Jony, tras un pase también casi a placer, en este caso de Carmona.

Con la Mareona disfrutando de lo lindo en las gradas y celebrando la tercera victoria consecutiva a domicilio y sexta en el campeonato, llegó esa jugada final antes referida y que sirvió no ya para maquillar el resultado, sino fundamental y desgraciadamente para poner fin al récord de imbatibilidad de Mariño. Esperemos que no suponga en absoluto el que con el tanto almeriense, se ponga también fin a esta espectacular racha de resultados que acumula el Sporting.

Como se viene repitiendo hasta la saciedad en las últimas jornadas, es lícito que esta afición que ahora ve a su equipo líder, después de cómo lo había visto allá por el mes de diciembre, se ilusione con la posibilidad de lograr el ascenso directo. Son los jugadores los que han de mantener siempre los pies en el suelo. Y para ello está Baraja, que ha demostrado saber muy bien lo que se trae entre manos.

Con humildad, trabajo y confianza este Sporting de momento parece que va directo al ascenso. Queda un partido menos por delante, pero aún son 27 puntos los que hay que pelear. Contra el Reus no hay otra: ¡a por la novena en casa!

Post Scriptum: parece claro que Nano Mesa será el elegido para suplir la más que previsible ausencia de Santos. Lo que no está tan claro es quiénes se podrían sentar en el banquillo como posibles recambios. Semana fundamental en ese sentido para que a alguno pudiera a volver a vérsele por los banquillos de El Molinón Enrique Castro ´Quini´.