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Goles para Quini en el Sahara

Niños y jóvenes de los campamentos de refugiados de Tinduf organizan un torneo en memoria del Brujo, al que conocieron en sus vacaciones en Asturias

Sidahmed Matala y su familia, en la actualidad.

Sidahmed Matala tenía ocho años cuando su destreza con el balón llamó la atención del entonces presidente de las peñas del Sporting, Pepín Braña. Corría el verano de 2009 y el chiquillo había viajado a Asturias por primera vez desde los campamentos de refugiados saharauis en Argelia. Braña lo vio jugar en un parque de Gijón y le invitó a visitar el club. El chiquillo tuvo la oportunidad de hacerse fotos con el presidente, el entrenador y por supuesto con los jugadores. Entre todas esas fotografías hay una que Sidahmed Matala guarda con especial cariño y es en la que aparece con Quini, vistiendo la camiseta que le regaló y le firmó. Hace unos días, a finales de marzo y coincidiendo con un viaje de la Asociación de Amigos del Sahara de Asturias, niños y jóvenes del campamento de Bojador, donde reside Sidahmed Matala, organizaron un torneo en memoria de Quini, fallecido el pasado mes de febrero. La leyenda de El Brujo, sin embargo, sigue viva en sus recuerdos.

Sidahmed Matala es uno de los muchos niños refugiados saharauis que viajan a Asturias desde hace años cada verano. Lo hacen a través del programa solidario "Vacaciones en paz", huyendo de las duras condiciones de vida y las altas temperaturas de la hamada argelina, del que dicen que es el desierto más inhóspito del planeta. Durante esas estancias de dos meses en Asturias no suele faltar la visita a Mareo, así que el equipo es bien conocido en los campamentos y los mayores saben muy bien quien es Quini.

Carlos de la Parte, el padre de acogida de Sidhadmed Matala, guarda como oro en paño la camiseta rojiblanca que Quini y el entrenador Manuel Preciado, también fallecido, le firmaron al chiquillo. Recuerda lo cariñosos y atentos que fueron todos con él y que les regalaron entradas para asistir a un partido contra la Real Sociedad. Cuenta que el crío se marchó de Asturias con ella en la maleta tras pasar su primer verano en Corias, en Pravia, y que la guardó durante todo el año. El verano siguiente regresó con ella puesta. Hace unos días, Carlos de la Parte desembarcó en Tinduf con una nueva camiseta para el muchacho, una gris, en la que Quini aparece disparando a puerta y con la palabra "leyenda".

Aprovechando que el fútbol es una de las principales distracciones para los chiquillos en los campamentos y que durante las vacaciones de finales de marzo había un modesto campeonato de fútbol organizado, a Sidhadmed Matala y a sus amigos se les ocurrió dedicárselo a la memoria de Quini, tras saber de su fallecimiento. Llenaron Bojador de carteles en los que se leía "Ahora Quini, ahora" en español y en hasanía -el dialecto árabe de los saharauis- y la daira o barrio de Agti fue la sede del torneo.

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