De cinco meses sin ganar fuera, con un pobre bagaje tanto en puntos como en juego, a ser un equipo solvente y que da la cara a domicilio. La llegada de Baraja ha devuelto la alegría y la competitividad a un Sporting que atraviesa un gran momento, es líder, lleva siete victorias seguidas, y acumula nueve partidos consecutivos sin perder. El conjunto rojiblanco ha hecho un fortín de El Molinón, donde enlaza nueve triunfos consecutivos. Y lejos de Gijón el Sporting aspira ahora a igualar la racha de cuatro triunfos seguidos que consiguió el equipo entrenado por Preciado en la temporada 2007-2008, que fue la del penúltimo ascenso a Primera.

Desde ese momento el Sporting nunca llegó a enlazar en la última década cuatro triunfos seguidos a domicilio. Aquella temporada, la segunda con el técnico cántabro en el banquillo, el Sporting firmó un brillante inicio de temporada fuera de casa. Tras empatar en la segunda jornada en Las Palmas a dos tantos, el Sporting se impuso después al Xerez (0-2) en la cuarta jornada, al Numancia (0-2) en la sexta, al Hércules (2-3) en la séptima, y a la Real Sociedad (0-1) en la novena. La racha la truncó el Nàstic, que ganó 2-0 a los rojiblancos en la undécima jornada.

Ahora el Sporting lleva tres triunfos seguidos fuera. Tras caer en el derbi ante el Oviedo (2-1), el conjunto entrenado por Baraja logró sacar un empate de Lorca (0-0), aunque el sabor fue agridulce, ya que el conjunto murciano llegaba con una racha de diez derrotas seguidas al partido. Hubo que esperar a la siguiente salida para ver ganar de nuevo al Sporting a domicilio, con un 0-1 ante el Sevilla Atlético, y llevándose los tres puntos a Gijón de nuevo cinco meses después, ya que no lo lograba desde octubre, con el triunfo por 0-2 en León. Después de esa victoria ante el filial del Sevilla llegaron la meritoria victoria en Huesca (0-2), que sirvió para dar un golpe sobre la mesa, y el de la última salida de Liga a Almería (1-3).

En lo que va de temporada el Sporting ha logrado 19 de los 61 puntos que lleva a domicilio. La base del Sporting actual está siendo su fortaleza en El Molinón. Un rasgo que le diferencia del de Preciado que logró el penúltimo ascenso de los rojiblancos, ya que en aquella ocasión se consiguieron 34 de los 72 puntos de final de Liga fuera de Gijón, o lo que es lo mismo, casi la mitad de los puntos de aquella temporada.

El Sporting tendrá por delante el reto de conseguir ahora su cuarto triunfo seguido a domicilio en Valladolid, un campo en el que perdió en su última visita, en la única derrota fuera de casa en el último ascenso. Aunque de Zorrilla en la época reciente el Sporting se trajo un buen recuerdo, como el triunfo por 1-2 en la penúltima jornada de la temporada 2008-2009, que sirvió para dar media permanencia al conjunto entrenado también por aquel entonces por Preciado.

De Zorrilla el Sporting ha logrado traerse los tres puntos en dos de las últimas cinco visitas en liga. En 2015 en Segunda los rojiblancos cayeron 3-0 y en 2009, en Primera, 2-1. La temporada anterior fue el mencionado 1-2; y antes en Segunda, en 2007, el Sporting perdió, un año después de haber ganado 1-3.