Después de dos partidos disputados lejos de El Molinón Enrique Castro 'Quini', y con un bagaje más que positivo al menos en lo que a resultados se refiere, vuelve el Sporting este domingo a jugar ante su afición, con un más que previsible lleno en las gradas. Y van ya unos cuantos.

Lo hará con el firme propósito de sumar la que sería la décima victoria consecutiva a la vera del Piles. Enfrente, un Albacete que llega de la mano de uno de esos entrenadores de 'colmillo afilado', Enrique Martín, quien por cierto se las ha tenido tiesas con la prensa albaceteña con palabras muy duras, respondiendo a las críticas a cerca del rendimiento del equipo manchego.

Ha dicho por ejemplo que no se valora el hecho de que el Albacete estaba el año pasado en Segunda B y que ahora le toca jugar ante 30.000 espectadores en Gijón y después lo mismo en Zaragoza. Que su objetivo era la permanencia y que se va a lograr, reafirmándose en que su equipo está realizando una gran temporada. Para rematar ha sentenciado (palabras textuales): "trato de ser coherente y sé lo que digo, puedo ser ambicioso pero gilipollas no". Enrique Martín en estado puro.

Un objetivo muy distinto es el que se marcó el Real Sporting (SAD para desgracia de no pocos sportinguistas). Y una forma de ser también muy distinta la de nuestro entrenador, el 'Pipo' Baraja, que por si algo se caracteriza es por la mesura en sus declaraciones, la cual ha sabido contagiar a buena parte de su plantilla.

No es por ello de extrañar que Calavera haya recordado el hecho irrefutable de que "quedan seis partidos y nosotros tenemos que intentar ganar para asegurar virtualmente el playoff". Porque esa es la realidad. El Sporting ahora mismo tiene en su mano el ascenso por la vía rápida, pero aún no ha logrado siquiera certificar matemáticamente el playoff. Todo tan cerca por tanto, pero al tiempo tan lejos. Y es que seis jornadas o lo que es lo mismo 18 puntos dan para muchas historias y muchos finales. Unos felices y otros mucho menos.

Así que habrá que salir con la lección bien aprendida del último partido ante el Reus. Nada que no sepan de sobra nuestros jugadores: confianza cero, máxima concentración y lucha sin cuartel desde el pitido inicial hasta la conclusión del encuentro. Si este Sporting hace las cosas como ha demostrado que sabe hacer, podría incluso no requerir del milagro de turno del 'pulpo' Mariño. Los corazones rojiblancos lo agradecerían.

Quedan aún varios entrenamientos para comprobar si finalmente Baraja podrá contar con el máximo goleador del equipo. Habrá que ser optimistas y si no, confiar como se ha hecho en los últimos partidos en el que ha sido su sustituto. Pero sería bueno que para próximas lesiones, que ojalá nunca lleguen, de este tema también se extraigan lecciones a quienes corresponda.

Post Scriptum: al día siguiente de ser 'llamado a consultas' por su entrenador ante todos los presentes en Mareo, Jony ha sido nombrado "jugador del mes" de Abril de LaLiga 1|2|3 por la propia Liga. Merecido galardón y merecido también lo primero, aunque hay quien siempre desearía que estas cosas se quedasen dentro del ámbito interno.