Las taquillas de El Molinón registraron esta mañana largas colas de aficionados que no han querido quedarse sin sitio para el partido del Sporting B de este sábado ante el Cornellà, correspondiente a la vuelta de la primera eliminatoria de la fase de ascenso a Segunda División. Una gran demanda que no ocultó el enfado de los abonados por estar obligados a tener que retirar una localidad, ya que el club ha cambiado el protocolo habitual por cuestiones de seguridad.

Al partido entre el Sporting B y el Cornellà que se disputará este sábado en el Pepe Ortiz de Mareo, a las 18.00 horas, sólo podrán entrar 1.170 personas. El Sporting ha explicado que debe acotar el aforo por "cuestiones de seguridad" y que, además, los abonados tendrán que pasar previamente por taquilla, ya que se les exigirá una entrada para acceder al campo. Estas localidades, que serán gratuitas para los socios, se han puesto a disposición del público a partir de las 10 horas de hoy, en las taquillas de El Molinón, y con el día de mañana, a las 20 horas, como fecha límite. Se podrán retirar un máximo de dos por persona. El día de partido no se despachará ninguna entrada ni se podrá acceder solamente con el carné de abonado, a excepción de los niños menores de 12 años.

El club gijonés explica que el duelo entre el Sporting B y el Cornellà se ha tenido que trasladar a Mareo "al objeto de preservar el terreno de juego" de El Molinón, donde no habría problemas de aforo. El Sporting, en un comunicado en el que justifica esta decisión, se basa en "la climatología adversa prevista para el fin de semana" para proteger así el escenario del encuentro en el que, al día siguiente, el primer equipo se jugará ante el Granada seguir en la carrera por el ascenso a Primera. El filial rojiblanco afronta la vuelta de la primera eliminatoria de la fase de ascenso a Segunda División tras el 2-2 cosechado en tierras catalanas el pasado fin de semana.