Baraja afronta el partido del sábado en Córdoba con una duda. Más allá del debate de si el técnico rojiblanco decide salir con toda la artillería o dar descanso a algún futbolista de cara al play-off, cosa que parece poco probable, ya que el Pipo ha insistido en la necesidad de la tercera plaza, la duda se sitúa en el eje de la zaga. Álex Pérez se encuentra apercibido de sanción, igual que Isma López y Nacho Méndez, y si el central madrileño ve el sábado una tarjeta deberá cumplir la sanción en el partido de play-off. Sin embargo, si opta por darle descanso y no arriesgar, el futbolista entraría limpio a la promoción, ya que las tarjetas de la Liga quedan anuladas para ese tramo decisivo y todos los futbolistas vuelven a tener el contador de amonestaciones a cero.

Álex Pérez vio su cuarta tarjeta amarilla en Almería en la 33.ª jornada de Liga. Baraja le dio descanso en Cádiz para que no viese la quinta tarjeta y en Valladolid se quedase sin dos centrales, ya que Guitián no podía jugar al estar cedido por el conjunto pucelano y existir la cláusula del miedo (de jugar, el Sporting hubiera tenido que pagar 50.000 euros a los de Pucela). Después de eso ha encadenado seis partidos seguidos sin ser amonestado. Baraja tiene también la incógnita de si Guitián supera sus problemas musculares. En ese caso no sería descartable que el cántabro actuase por Álex Pérez para evitar riesgos y no exponerse a una posible amonestación del madrileño en El Arcángel. En el play-off todos los futbolistas empiezan de cero el contador de amonestaciones, y los ciclos de suspensión cambian, ya que se producen a tres tarjetas en vez de a cinco como en la Liga. Esto significa que un jugador que vea tres tarjetas podría perderse el último partido, el que puede ser el del ascenso a Primera.