Así lo confirmó a EFE-TV la hija del marinero, Rosa María, quien informó de que su padre, que cree que se encuentra en el puente del barco junto al capitán, llamó esta tarde a su domicilio en Baiona. En breve conversación con su esposa, le indicó que estaba bien, aunque su familia lo encontró un poco nervioso.

El tripulante, que llevaba cuatro meses en alta mar y tenía previsto regresar el día 30 de este mes, pidió a su familia que esté tranquila y le insistió en que no hay heridos en el buque.

La familia, explicó la hija del tripulante, está en contacto con la Consellería de Pesca y con el Ministerio de Exteriores, que les han reclamado tranquilidad, puesto que están trabajando para resolver el problema.

Rosa María Álvarez, además, señaló que su madre está nerviosa y se derrumba cada cierto tiempo, si bien se mostró más esperanzada cuando escuchó a su esposo por teléfono. EFE