Forcinas (Pravia),

V. DÍAZ PEÑAS

Un hombre de 76 años, Joaquín Borjabad Gallego, murió ayer al caer de una escalera a la que se subió para podar unos árboles en su vivienda de Forcinas, Pravia. El hombre falleció en el acto y los servicios de emergencia no pudieron hacer nada para salvar su vida. Tanto su familia como el resto de vecinos quedó consternado ante este fatal suceso que acabó de golpe con la vida de este madrileño de nacimiento pero asturiano de corazón. El funeral se celebrará hoy a las siete y media de la tarde en la colegiata de Pravia.

Joaquín Borjabad Gallego, una persona muy querida y conocida en Forcinas y en el resto del concejo, deja dos hijos y viuda, que ayer no podía contener su dolor. Ella estaba en el interior de la casa cuando su marido cayó de lo alto de la escalera. Como apuntaba un vecino, todo sucedió muy rápido y supuso una gran consternación en el pueblo. Joaquín y su mujer habían llegado a Forcinas el pasado domingo para pasar el verano, como solían hacer habitualmente.

Borjabad Gallego nació en Madrid y estudió ingeniería agrónoma. Cuando se licenció vino a trabajar a Asturias, donde, como apuntaron ayer sus familiares, se enamoró de esta tierra y de su mujer, natural del núcleo praviano de Forcinas. Después de pasar unos años en la región fue destinado a Pastrana (Guadalajara), donde residía en la actualidad. No obstante, siempre que podía, en vacaciones, Semana Santa o puentes, regresaba a Forcinas, donde aún mantiene abierta su casa. Realizó diversos estudios y trabajos relacionados con la agricultura y la apicultura. Su labor fue reconocida con un premio al mérito agrícola. En Forcinas, donde abundan las plantaciones de kiwi, también realizó trabajos y forjó grandes amistades. De ahí que fuese una persona querida y conocida en el pueblo.

Joaquín, que se consideraba un enamorado de Asturias, llegó a Forcinas el pasado domingo. Su intención, como apuntaron sus familiares, era ver la final del Mundial en Pravia y disfrutar del verano asturiano. La mala suerte quiso ayer que sus sueños y los de su familia se truncaran. Tras la muerte de Joaquín, la tristeza se apoderó del pueblo. El funeral por el fallecido tendrá lugar hoy a las siete y media de la tarde en la colegiata de Pravia. Posteriormente su cuerpo será incinerado.