La juez de primera instancia e instrucción Nuria Álvarez Posada ha desestimado el recurso de reforma -subsidiario de apelación- presentado por la defensa de Tomás Rodríguez Villar, «Tomasín», que había solicitado la salida de la cárcel de su cliente al entender que ya no existe riesgo de fuga y que mientras siga abierta la investigación procede dejar sin efecto la orden de prisión. Álvarez Posada no es de la misma opinión y por eso ha decidido mantener encarcelado al autor confeso de la muerte de su hermano Manuel, un suceso que tuvo lugar en el pueblo tinetense de La Llaneza en septiembre del año pasado y tras el cual Tomasín estuvo escondido en el monte durante 57 días manteniendo en jaque a la Guardia Civil.

El letrado Manuel García García-Rendueles, que se encarga de la defensa de Tomasín, ya había intentado la puesta en libertad de su cliente en otra ocasión obteniendo la misma respuesta por parte de la juez, que en enero de este año también alegó riesgo de fuga teniendo en cuenta los precedentes de que el reo se echó al monte nada más cometer el crimen para huir de la justicia.

La Guardia Civil lo intentó todo para dar con el presunto homicida de La Llaneza, desde batidas con un importante número de agentes y medios aéreos como helicópteros, hasta una estrategia más paciente, con agentes situados en apostaderos durante horas, protegidos de la lluvia con plásticos. Incluso probaron a poner un cebo a Tomasín, como publicó en su día LA NUEVA ESPAÑA. Los agentes recogieron tres de los caballos del presunto homicida y los encerraron en la cabaña donde se produjo el crimen, con la esperanza de que acudiese a soltarlos. Tomasín no se dejó atraer a esta trampa. Tuvieron que pasar varias semanas más para que fuese finalmente cazado.

La última vez que Tomás Rodríguez Villar salió a la calle fue para personarse en el Juzgado de Tineo y conocer de primera mano que el fiscal le acusa de asesinato y tenencia ilícita de armas en relación a la muerte de su hermano. Fue el pasado 26 de enero. Estuvo unas horas fuera de los muros del penal y fue trasladado de nuevo a la enfermería de Villabona nada más terminar la cita con la juez y el fiscal. La jueza de instrucción, Nuria Álvarez Posada también le comunicó ese día a Tomasín que será juzgado ante un jurado popular, algo que ya estaba previsto pero que quedó formalizado el 26 de enero. «No fue más que un trámite formal. La comparecencia se hizo para que el fiscal precisara los hechos que se le imputan y calificase el presunto delito», aseguró ese día su abogado.

Tomás Rodríguez Villar sigue en prisión preventiva y «lo lleva razonablemente bien», explicó su abogado, «aunque tiene días mejores y otros peores», recalcó el letrado. «Es muy reservado y nunca habla nada sobre lo ocurrido. Eso sí, tiene muchísimo interés en que se haga todo lo posible para que salga en libertad», recalcó García-Rendueles. La instrucción del caso está ya a punto de finalizar, a falta de una prueba pericial psicológica de Tomasín y de establecer si el presunto maltrato y abandono familiar del supuesto autor del crimen era conocido por los servicios sociales.