Badajoz, E. P./ EFE

Tres personas murieron la noche del sábado en un tiroteo ocurrido en el club de alterne Tabarín, en Don Benito (Badajoz). Los fallecidos son un camarero del local, que realizaba las funciones de encargado, y dos residentes de un centro de rehabilitación de toxicómanos, cerrado con una valla metálica, situado en el mismo recinto. Las instalaciones se encuentran en dependencias aparte y responden al nombre de Centro de Reeducación Emocional «La Paz Es Posible». Dos de los cadáveres fueron encontrados en los alrededores y no en el interior de local, donde sí se localizó el cuerpo sin vida del barman. El autor está identificado, pero anoche aún no había sido detenido.

El presunto autor del triple crimen disparó «indiscriminadamente» contra los clientes, según fuentes cercanas a la investigación. Las mismas fuentes relataron que esa persona había salido del local «violentamente» momentos antes y se había dirigido a su vehículo para coger una escopeta. Los hechos ocurrieron entre las diez y las diez y media del pasado sábado, cuando, por causas que por el momento se desconocen, el individuo, de entre 40 y 45 años, volvió al club, abrió fuego y mató a tres personas que se encontraban en la instalaciones en aquellos momentos.

El delegado del Gobierno en Extremadura, Alejandro Ramírez del Molino, avanzó que la investigación para esclarecer el tiroteo está «abierta» y «no hay nada descartado» sobre el origen de los hechos.

Puntualizó que la asociación «La paz Es Posible», que está «casi pared con pared con el lugar de alterne», pidió su ingreso en la Federación Extremeña de Atención al Drogodependiente, pero que «no les han dado cabida». Al mismo tiempo, avanzó que este centro podría ser propiedad de un familiar político del dueño del Tabarín y matizó que ambos locales «no» guardan «relación».

Asimismo y acerca de las tres personas fallecidas, informó de que son de nacionalidad española y que ayer por la mañana se les practicó la autopsia. Sobre el lugar en el que fueron hallados, precisó que el cadáver del camarero apareció «en el interior, no en el mismo local en sí», sino «en uno de los pasillos», y los otros dos «fuera de las dependencias del lugar de alterne».

El representante del Ejecutivo central felicitó a la Policía Nacional por su «rápida intervención», al detener a una persona pocos instantes después de haberse producido estos hechos. Los agentes detuvieron el sábado por la noche, en el barrio de San Fernando, a una persona que portaba un arma y que pasó a disposición judicial. El arrestado parece ser que podría ser «acompañante de la que se halla en búsqueda y captura y que está plenamente identificado». Sobre estos dos varones, el delegado Gobierno precisó que son naturales de Don Benito y que tienen antecedentes «por algún tema delictivo». Ramírez del Molino resaltó además que hay «más testigos», que la «investigación está abierta» y que se hallan «a la espera de que en algún momento se produzca la detención» del varón en búsqueda y captura.

A este respecto, hizo hincapié en que los sucesos producidos «últimamente» han tenido una «rápida respuesta por parte de Guardia Civil: en el caso del doble asesinato de Zafra, que hubo de inmediato casi una detención del probable autor de los hechos y en Don Benito, donde rápidamente se ha tenido un primer detenido. El alcalde de la localidad pacense, Mariano Gallego, mostró su «tristeza» por estos hechos que, según declaró, «vienen ocurriendo por desgracia en los últimos tiempos». Gallego lamentó que el grave suceso empañe los «buenos datos» presentados en la Junta Local de Seguridad celebrada en el Ayuntamiento de Don Benito. Los investigadores creen que ni el propietario del club, que se había marchado a cenar antes del suceso, ni el centro de atención a toxicómanos, tendrían relación con los hechos, aunque tampoco se ha avanzado cuál podría ser el móvil del crimen.