Melilla, E. P.

Un ciudadano marroquí, residente en Melilla, resultó ayer herido tras quemarse a lo bonzo en la frontera entre Melilla y Marruecos. El objetivo de la acción de protesta era denunciar un problema de su hija con la Justicia del reino alauí, según manifestaron posteriormente fuentes policiales.

Los sucesos ocurrieron en el puesto fronterizo de Beni-Enzar cuando el hombre, de entre 35 y 40 años de edad y cuya identidad no ha sido facilitada, se prendió fuego con un mechero tras haberse rociado con gasolina.

La acción ocurrió en la llamada «tierra de nadie» entre los puestos fronterizos español y marroquí, ante el control de documentación del Cuerpo Nacional de Policía.

Agentes de seguridad, tanto de un lado como de otro de la aduana, emplearon extintores para apagar las llamas que, en un principio, han afectado a un 20 por ciento del cuerpo del hombre.

Las ambulancias del servicio de atención médica urgente del 061 llegaron a la frontera y trasladaron inmediatamente al herido al Hospital Comarcal de Melilla, donde el hombre quedó ingresado.