Madrid / Oviedo

A punto de tocar a su fin, a falta de que las comunidades que hoy disfrutan de fiesta cierren el operativo especial de tráfico de Semana Santa, la cifra total de fallecidos en las carreteras españolas se eleva a treinta y seis, en los treinta y un accidentes mortales ocurridos desde las tres de la tarde del viernes 30 de abril hasta las ocho de la tarde horas de ayer, según datos de la Dirección General de Tráfico, que advirtió de los atascos a la entrada de algunas capitales, especialmente Madrid. Ninguno de los dos siniestros con fallecidos registrados ayer se produjo en carreteras del Principado de Asturias, donde la mayor incomodidad la producía la niebla que, durante la mañana, dificultaba la visibilidad en la nacional 630 a la altura de Campomanes.

Las autoridades no dieron cuenta ayer de retenciones importantes en Asturias, probablemente debido a que el mal tiempo de los últimos días contribuyó a que el regreso a casa se realizase de forma escalonada. Como ejemplo, a media tarde de ayer, era posible regresar al centro de la región desde el Occidente sin retenciones, aunque con un considerable número de usuarios en la carretera. Únicamente a la altura de Muros de Nalón, en el acceso a la Autovía del Cantábrico desde el Occidente, se registraba ayer una acumulación de vehículos de alrededor de un kilómetro de longitud, en uno de los puntos que suele registrar grandes colapsos en los períodos de mayor coincidencia de coches en la carretera.

Durante el operativo especial de Semana Santa se registró en Asturias un accidente mortal, el pasado jueves, cuando un joven de San Román de Candamo, Enrique Fernández Arias, de 20 años, cayó a su coche a la vía en la localidad de Beifar y su vehículo fue arrollado posteriormente por un tren.

El único siniestro con muertos que se produjo ayer en España se registró en una carretera autonómica de Baleares, en San Antony de Portmany, en el que falleció una persona en una colisión entre una moto y un monovolumen, a las 14.20 horas.

El día con mayor número de siniestros fue el pasado miércoles, cuando se produjeron cuatro accidentes mortales y nueve fallecidos.

Si en Asturias el acceso a las grandes ciudades se realizaba con cierta comodidad, la Dirección General de Tráfico confirmaba ayer, pasadas las ocho de la tarde, que las vías de acceso a Madrid capital y las provincias limítrofes de la comunidad registraban una circulación muy complicada, especialmente en la de Andalucía, con retenciones importantes en la zona de Almuradiel (Ciudad Real) y, en la provincia de Toledo, en Camuñas y Temblque.

Igualmente hubo problemas de entrada por la N-V, también en Toledo, en Oropesa, Talavera de la Reina y Valmojado.

En la carretera de Valencia, las retenciones se dieron en la provincia de Cuenca, en zonas como Montalvo, Salices o Belinchón, mientras que en la de La Coruña se localizaron en Zamora, en Villalpando; en Valladolid, en Bercedo; en Segovia, en la zona de El Espinar y, ya en Madrid, en Torrelodones y Las Matas, por un accidente.

Las provincias de Cádiz, Granada y Sevilla, así como Zaragoza, Barcelona y Gerona, también se vieron afectadas.