Córdoba, Efe

La Policía Nacional ha puesto patas arriba la finca cordobesa «Las Quemadillas», convencida de que allí podrían estar los cuerpos de los dos hermanos desaparecidos el pasado mes de octubre, Ruth y José, de 2 y 6 años, de cuya muerte se culpa a su padre, José Bretón. Sin embargo, ayer, poco después de las nueve de la noche, los agentes dieron por concluida, sin éxito, esta búsqueda. Los pequeños siguen sin aparecer.

El rastreo en la finca de los padres de Bretón comenzó el lunes y durante todo el día de ayer continuó. Hacia las 17.15 horas llegó a la finca familiar el furgón policial que transportaba a José Bretón, padre de los niños, que permanece en prisión desde el 21 de octubre acusado de un delito de detención ilegal, y que estuvo presente en la búsqueda. Previamente, hacia las 16.45 horas, se personaron en el lugar agentes de la Policía científica y judicial, así como arqueólogos y técnicos de la Escuela de Agrónomos de Córdoba que participan en el rastreo para verificar posibles modificaciones en el terreno.

En la búsqueda, los agentes estuvieron utilizando una pequeña excavadora y otra de mayor dimensión con el objetivo de remover la tierra y retirar los escombros que se encuentran en una parcela anexa a la finca registrada. Concretamente las máquinas excavadoras estuvieron trabajando en una zona de naranjales adjunta a la vivienda principal de la finca, así como en una parcela anexa y que servía de escombrera a los padres de Bretón.

El pasado lunes la madre de los menores, Ruth Ortiz, estuvo presente en el registro preliminar para verificar si había habido algún tipo de modificación en la estructura de la vivienda y en el terreno de la finca, ya que ella había residido allí durante dos años con Bretón. Aunque Ortiz señaló hasta «tres anomalías», según han confirmado fuentes de la investigación, las comprobaciones realizadas sobre los puntos señalados dieron resultados negativos para encontrar indicios sobre el paradero de los menores.

En un principio estaba previsto que el registro en la finca y los aledaños se prolongase hasta últimas horas de ayer, aunque otras pesquisas se pueden extender durante toda la semana y coincidir con la declaración indagatoria de Bretón ante el juez, que tendrá lugar el próximo viernes. Ayer, y durante un descanso en las labores de búsqueda, la acusación particular en el caso de Ruth y José se mostraba convencida de que «si los niños están en la finca, los vamos a encontrar». Así, en declaraciones a la prensa, la abogada de la madre, María del Reposo Carrero, dijo que «mientras se siguiera trabajando en la zona era muy pronto para hacer un análisis. Para la madre de los niños, Ruth Ortiz, estos días están siendo muy difíciles». Por su parte, el abogado del padre de los dos menores, único procesado en la causa, José María Sánchez Puerta, explicó que el primer día de búsqueda transcurrió «muy bien» en el interior de la finca en la que el padre de los niños, José Bretón, procesado por supuestos delitos de detención ilegal en la modalidad cualificada de menores con la agravante de parentesco, y de simulación de delito, estuvo con sus hijos antes de denunciar su supuesta desaparición el 8 de octubre de 2011.

No es la primera vez que la Policía Nacional investiga en esta finca, propiedad de los padres de José Bretón. Ya buscó en numerosas ocasiones sin llegar a ningún resultado, por lo que en esta última ocasión ha empleado maquinaria pesada, como es el caso de las dos excavadoras, así como otros métodos más sofisticados. Las nuevas diligencias se llevan a cabo en un último intento del juez para acumular nuevos indicios que apuntalen la imputación de Bretón antes de la declaración indagatoria del mismo que tendrá lugar pasado mañana. Entonces está previsto un careo entre Bretón y el primo de Ruth Ortiz.