Oviedo,

Félix VALLINA

Los estudios y las evidencias ponen de manifiesto que en el mercado de la droga hay cada vez más sustancias que traen de cabeza a policías, camellos, consumidores y expertos en drogas sintéticas. Dejando a un lado la cocaína, que se mantiene como una de las sustancias más demandadas, drogas como el speed -un potente estimulante compuesto por sulfato de anfetamina- ya han encontrado un hueco entre las más demandadas. El speed siempre ha estado en el catálogo de drogas de síntesis, pero circunscrito a ambientes y zonas geográficas determinadas, algo que, según la Policía, hace «aún más importante» la operación desarrollada en Asturias a finales del mes pasado, cuando se detuvo a la bautizada como «banda de los surferos» con 37 kilos de esta sustancia entre una variada ensalada de drogas. «Asturias solía ser hasta ahora un destinatario final de sustancias de diseño, pero no teníamos grandes traficantes. Está claro que con la desarticulación de esta banda se ha evitado que aquí se estableciese un punto de distribución para todo el norte de España y que el speed tenga muchísima más presencia en las calles de la región», señalaron fuentes de la investigación.

El speed es conocido en la calle como «la coca de los pobres» -según fuentes policiales- y el gramo puede conseguirse a menos de la mitad de lo que cuesta la misma cantidad de cocaína, a un precio que ronda los 25 euros. No obstante, según los expertos, ambas drogas comparten efectos como «la euforia, la excitación, la disminución del cansancio o la sensación de fuerza». La Policía asegura que el speed que llega a España suele provenir de los Países Bajos y que hasta hace unos años el mercado se centraba casi exclusivamente en las comunidades cercanas al País Vasco, la meca de esta droga hasta el año 2009, una fecha que los expertos señalan como el comienzo de la expansión seria del speed hacia otros puntos del país. «Se puede decir que en Asturias su presencia era escasa hasta ahora», asegura la Policía.

Según los expertos, los efectos del speed son una bomba para la salud. Su consumo, entre otras cosas, afecta al hígado, al estómago o al calcio de los dientes y de los huesos. Además, el abuso conlleva problemas psicológicos, como ansiedad, agitación, conductas agresivas, confusión, alucinaciones o psicosis. «El speed es un estimulante muy potente, la pauta de consumo es muy diferente a la de la cocaína. Con dos o tres rayas puedes aguantar perfectamente toda la noche, pero el problema es que los chavales lo consumen al mismo ritmo que la cocaína o aún más rápido, porque es más barato», aseguraron fuentes policiales.

La «banda de los surferos», liderada por un ovetense de 34 años que responde a las iniciales J. M. P., conocido como Piuki, tenía en su poder la mayor cantidad de speed aprehendida hasta ahora en Asturias y una de las más importantes de España: casi 37 kilos de esta droga de diseño (estaban en un almacén que tenía alquilado Piuki en Lugo de Llanera). Además, a sus miembros también se les incautaron mil bellotas de hachís, marihuana, 60 gramos de cocaína, 38 kilos de hachís en placas, diversas cantidades de MDMA -una sustancia psicoactiva con propiedades estimulantes-, una pistola Star de 9 milímetros con su munición, dos armas de fogueo, 71.000 euros en efectivo, numeroso material para el «corte» y la manipulación de la droga, un uniforme policial, 32 teléfonos móviles y siete vehículos.