Oviedo, M. J. I.

La Dirección General de Tráfico (DGT) aprovecha la «operación salida» de Semana Santa para estrenar el nuevo radar aéreo «Pegasus», un sistema único en el mundo, que mide la velocidad desde una altura de 300 metros y a un kilómetro de distancia. «Pegasus» hace varias mediciones y luego obtiene una media.

El sistema, desarrollado con tecnología militar, ha tardado seis años en ser verificado y homologado por el Centro Español de Meteorología. Presume de un margen de error del 3 por ciento y su cometido es reducir los accidentes de tráfico por velocidad excesiva, que en 2011 dejaron 475 víctimas en las carreteras españolas. Ya se encuentra instalado en uno de los helicópteros de la DGT y se utilizará principalmente para controlar la velocidad de los vehículos que circulan por las vías convencionales, las que no tienen separación física entre los carriles de ambos sentidos, y en las que suele ser más difícil establecer controles con vehículos equipados con radar para denunciar a aquellos conductores infractores que no respeten la velocidad fijada en la carretera por la que transitan.

Para captar la velocidad, el helicóptero debe mantener una visión directa con el vehículo que se pretende controlar. El sistema puede detectar con extremada precisión velocidades de hasta 360 kilómetros por hora. Resulta operativo incluso desde una altura de vuelo del helicóptero de 1.000 pies, más de 300 metros, y hasta una distancia, en línea recta con el vehículo controlado de un kilómetro.

El radar consta de dos cámaras, una panorámica que facilita el seguimiento y captación de la velocidad, y otra de detalle, con un teleobjetivo que «lee» la matrícula del vehículo.

Por otro lado, la DGT pone en marcha este mediodía la segunda fase de la «operación salida» de Semana Santa, más importante que la anterior por volumen y desplazamientos de vehículos a lo largo de la red viaria, por la que está previsto que circulen 7,5 millones de coches. Tráfico estima que se producirán problemas circulatorios y de retención en las salidas de las grandes ciudades que se irán incrementando a lo largo de la tarde para trasladarse posteriormente a los lugares de destino.

En las primeras horas de mañana es previsible que se produzca un incremento del tráfico a la salida de los núcleos urbanos, a los que se sumarán desde el mediodía los conductores de las comunidades de Cataluña y Valencia que inician las vacaciones.