El río Nalón se cobró ayer una víctima. El pescador, José Miguel Martínez Martínez, falleció tras caer al río en el límite entre los cotos de La Figal y La Cerezalina, en la vega de Forcinas (Pravia), cuando ayudaba a un amigo a sacar un salmón del agua. El suceso se produjo pasadas las once de la mañana. El cuerpo apareció trescientos metros río abajo, entre los puentes que unen la villa con Peñaullán y tuvo que ser sacado del agua por la grúa del helicóptero del Servicio de Emergencias de Asturias y la intervención de un bombero-rescatador.

Martínez, de 48 años, era natural de Loris (Salas) pero vivía desde hace años en Peñaflor, en Grado, donde trabajaba como fontanero. Deja esposa, Carmen Moro, y dos hijos, Alejandro y Noelia. Martínez era un apasionado de la pesca y también de la caza, deporte que practicaba en el coto de Salas desde hace décadas.

De momento, se desconocen las causas de la muerte. Si bien, en un principio se apuntó la posibilidad de que Martínez cayera desde el puente de Feve, a la altura de Forcinas, según testigos presenciales, se encontraba en la orilla del Nalón, acompañando a unos amigos que estaban pescando en el coto de La Cerezalina. Él no estaba pescando.

Hacia las once de la mañana, un compañero capturó un salmón con la caña y Martínez se acercó al río para coger la captura con una "sacadera". Fue ahí cuando resbaló. Después su cuerpo comenzó a flotar en el agua. Las mismas fuentes sospechan que se pudo dar un golpe mortal en la cabeza porque en los primeros cien metros de río que recorrió el cuerpo no cubre y podría haberse incorporado sin problema. Algún pescador, no obstante, apuntó que en la zona donde estaban pescando hay muchas corrientes.

El Centro de Coordinación de Emergencias recibió la llamada de alerta pasados cinco minutos de las once de la mañana. En la conversación telefónica, un amigo del fallecido explicaba que una persona había caído al río y que lo arrastraba la corriente. Media hora más tarde, un vecino de Pravia alertó de que había un cadáver flotando junto al puente ferroviario de Peñaullán.

Después de rescatar el cadáver con la ayuda del helicóptero, los bomberos de Pravia lo trasladaron hasta el prado de Salceo, donde se celebra la fiesta del Xiringüelu, para que las autoridades judiciales procediesen a levantar el cadáver. Minutos después, el coche fúnebre trasladó el cuerpo sin vida de Martínez al tanatorio de Salas.

El funeral por el alma de Martínez tendrá lugar, hoy, en la iglesia de Santiago de Villazón (Salas). Después, sus restos mortales recibirán sepultura.