Tres guardias civiles han fallecido hoy al caer su helicóptero cuando llevaban a cabo un rescate en la zona de Polinosa, en el municipio de Maraña, en la vertiente leonesa del puerto de Tarna, mientras que un cuarto agente ha resultado ileso puesto que había tomado tierra para iniciar las labores de auxilio del herido.

Los fallecidos son el capitán Emilio Pérez Peláez, el teniente Marcos Antonio Benito Rodríguez -este natural de Zamora-, ambos pilotos, de 55 y 48 años, y el agente de la Guardia Civil miembro del Grupo de Rescate Especial de Intervención de Montaña (Greim) José Martínez Conejo, de 49 años.

Se da la circunstancia de que uno de los pilotos, Marco Antonio Benito, residente en León, estaba a punto de solicitar una excedencia para trabajar en el ámbito privado.

Todos ellos eran experimentados en tareas de rescate con entre diez y veinte años de servicio en el Greim.

El capitán y el teniente pertenecían al Servicio Aéreo de la Guardia Civil con base en la localidad leonesa de Virgen del Camino, mientras que el guardia civil era del Grupo de Rescate Especial de Intervención de Montaña (Greim) que tiene base en Sabero (León).

El accidente se ha producido a las nueve de la mañana en la montaña de la Polinosa, en el Parque Natural de los Picos de Europa en la provincia de León, adonde había acudido el helicóptero de rescate de la Guardia Civil para proceder a la evacuación de un montañero, un coruñés de 28 años que participaba en una carrera extrema (la XIII edición del 'Raid Picos de Europa') y que hacia las 3:15 horas de la madrugada resultó herido por una fractura de tobillo, por lo que estuvo esperando junto a otro participante en la prueba durante casi siete horas. Finalmente fue evacuado por el Grupo de Rescate de bomberos del Servicio de Emergencias del Principado de Asturias (SEPA) y trasladado al Hospital Comarcal de Arriondas.

El helicóptero de la Guardia Civil se desprendió, cayó y se incendió con tres de sus cuatro ocupantes a bordo cuando iniciaba la operación de introducción del herido con ayuda del cuarto guardia civil, que ha resultado ileso puesto que ya había tomado tierra para inmovilizar al montañero.

Fue este cuarto agente, un sargento jefe de equipo del Greim de Sabero (León) quien dio aviso del incidente a los servicios de emergencias y confirmó el fallecimiento de sus tres compañeros.

Este guardia civil participó además en las labores de recuperación de los cadáveres en la zona del suceso.

La principal hipótesis que se baraja como causa del accidente es la del golpeo de una hélice del aparato contra una pared de la montaña.

Hasta el lugar se trasladó la autoridad judicial para el levantamiento de los cadáveres que fueron llevados a una zona idónea para su evacuación.

En la operación de rescate de los cadáveres han participado ocho agentes del Greim de León y Potes (Cantabria).

Además se mantuvo coordinación con el 112 de Asturias, que también activó un helicóptero de rescate con cuatro personas a bordo. Mientras tanto, la Guardia Civil de Oviedo mandó también un helicóptero y personal a la zona.

Con el suceso de hoy son catorce los guardias civiles que han fallecido en accidentes de helicópteros del instituto armado registrados en España desde 1982.