Una vecina de la localidad castropolense de Barres, Leonor F. S., falleció ayer mientras nadaba en el entorno de la playa de Arnao, en plena ría del Eo. Los socorristas del arenal nada pudieron hacer por salvarle la vida ya que cuando recibieron el aviso, en torno a las tres de la tarde, el cuerpo de la mujer estaba ya flotando en el agua, fuera de la zona habitual de baño de la playa.

La fallecida fue localizada en la margen derecha del arenal, en la zona de roca comprendida entre el fin del espacio de playa y la punta de la Cruz. De hecho, fue un hombre que paseaba por un camino paralelo a la playa -habitual zona de paseo del concejo- el que dio el aviso al ver lo que creyó un cuerpo flotando junto a las rocas.

Según fuentes cercanas al caso la mujer tenía un golpe en un lado de la cara, aunque se desconocen de momento las causas de su fallecimiento. Hoy a primera hora de la mañana se le practicará la autopsia en Oviedo para esclarecer lo ocurrido.

La vecina rondaba los setenta años de edad pero estaba muy activa y acostumbraba a nadar a diario en este arenal, el más cercano a su casa, lo que hace pensar en un accidente como causa del fallecimiento, ya que conocía bien la zona. Sus vecinos se mostraron ayer consternados por la noticia: "Era muy buena paisana y muy querida", comentó una conocida del pueblo de Barres. La familia de la fallecida, casada con un vecino de Tapia, es popular en la localidad, ya que su hijo regenta la ferretería La Canela y además preside el club de fútbol local.

La responsable de Salvamento del concejo castropolense asegura que los socorristas nada pudieron hacer por salvarle la vida a la mujer. "En cuanto les dieron el aviso, los socorristas fueron hasta el lugar, fuera de la zona de baño de la playa, y uno se metió incluso en el agua, pero ya vieron que estaba fallecida", precisa. De inmediato dieron aviso al 112, que puso en marcha el protocolo para proceder al levantamiento del cuerpo. La muerte de esta vecina se suma a otros dos fallecimientos registrados en lo que va de verano en las playas asturianas. En julio falleció un bañista ovetense en Luanco y a principios de mes otro hombre perdió la vida en la playa gijonesa de Poniente.