La fiesta de Nochebuena de Juan Gamoneda Avello, de 22 años, se vio truncada ayer de la forma más trágica posible. El joven, vecino de la localidad naviega de Anleo, perdió la vida en un accidente de tráfico en la carretera que conecta los también naviegos pueblos de Salcedo y Talarén. Su coche, un Seat Ibiza color plata, se salió por causas que se desconocen de la vía, precipitándose por un talud y golpeando brutalmente contra un árbol en una curva de la carretera. El joven falleció en el acto, en la madrugada del día de Navidad.

La conmoción por el suceso sacudió a todo concejo de Navia, donde Juan Gamoneda era muy conocido y apreciado. Deportista, estudiante universitario y amante de la música, había salido a disfrutar de la compañía de sus amigos tras la cena en familia. Jamás regresó al hogar. Trágicamente, encontró la muerte a menos de cuatro kilómetros de su casa, donde vivía con sus padres, que no tienen más hijos.

Se calcula que el accidente tuvo lugar en torno a las ocho de la mañana, aunque en ese momento nadie se percató de lo sucedido. Gamoneda iba solo en su coche cuando se produjo el brutal impacto contra el árbol. Al ser una carretera poco frecuentada, más en día festivo y tan temprano, nadie se dio cuenta del fatal accidente en el momento.

Fue hacia las nueve de la mañana cuando una vecina de un pueblo cercano descubrió el coche de camino al trabajo. Reconoció enseguida el vehículo de Gamoneda por una pegatina negra que lucía en su parte posterior. El turismo, convertido en un amasijo de hierros, se encontraba volcado sobre su costado izquierdo, entre ramas de arbustos, tras salirse de la carretera en una zona sin quitamiedos. El cadáver del conductor estaba en el interior.

De inmediato, se dio aviso a los servicios de emergencia, que sólo pudieron verificar el fallecimiento del joven. El cuerpo, tras recibir la correspondiente autorización judicial, tuvo que ser excarcelado del interior del vehículo por los Bomberos con base en el parque de Valdés. Cerca de las diez y media se concluyó la excarcelación, tras lo que se procedió a retirar el vehículo mediante el uso de una grúa.

La vida de Juan Gamoneda era, hasta ayer, la de un joven apasionado del fútbol y de la música, que cursaba estudios de Administración de Empresas en la Universidad de Oviedo. Antes, había completado en Navia el módulo de Formación Profesional de Contabilidad y Finanzas. Seguidor acérrimo del Barcelona, había desarrollado su carrera deportiva en la Unión Deportiva Los Castros, de Coaña. No era extraño verle disfrutando de este deporte en compañía de sus amigos durante los fines de semana. Además, Gamoneda era un fijo de los conciertos de música rock, en los que disfrutaba de su otra gran afición.

Durante los veranos, el joven, de 22 años recién cumplidos, se empleaba en la fábrica que Industrias Lácteas Asturianas tiene en Anleo, donde también es muy conocido su padre. La incredulidad ante lo sucedido dio paso a la conmoción por la desaparición del joven. Sus amigos y allegados no dan crédito al tan terrible final. "Ayer estuvimos hablando media hora y hoy no está. No puede ser", señaló uno de ellos, destrozado ante la trágica noticia. Nadie se explica que algo así le haya podido pasar a una persona tan joven, "con todo el futuro por delante". Los restos mortales de Juan Gamoneda recibirán sepultura hoy por la tarde, tras el funeral en la iglesia parroquial de San Miguel de Anleo.