El accidente aéreo ocurrido ayer en la base militar de Los Llanos, en Albacete, es el más grave que se ha registrado en España y protagonizado una un avión militar desde el año 1984.

Fue el 28 de febrero, cuando un Hércules C-130 de las Fuerzas Aéreas estadounidenses, con 18 personas a bordo, se estrelló en el término municipal de Borja, en la provincia de Zaragoza. Murieron todos sus ocupantes, 17 estadounidenses y un español que viajaba en calidad de observador.

Otro de los siniestros con mayor número de víctimas se produjo el 22 de marzo del año 2000. Un C-212 Aviocar del 408 Escuadrón del Ejército del Aire, con base en Torrejón de Ardoz (Madrid), impactó contra el suelo en Herrería (Guadalajara), pereciendo todos sus ocupantes: dos capitanes, un alférez, un subteniente y tres sargentos. Tras el impacto, el avión se incendió tras el impacto en una zona montañosa y de difícil acceso.

Pero el más grave sufrido por las Fuerzas Armadas Españolas se produjo el 26 de mayo de 2003, cuando 62 militares murieron al estrellarse un avión Yak 42 en cerca de la ciudad turca de Trebisonda.