La Guardia Civil de Zamora interceptó un vehículo que circulaba por la Autovía del Duero (A-11) a una velocidad de 221 kilómetros por hora y detuvo al conductor, un portugués de 22 años que viajaba con su mujer y su hija de 8 meses. Los hechos ocurrieron el pasado 31 de julio, a las nueve de la mañana, a la altura de Coreses (Zamora). El tramo está limitado a 120 kilómetros por hora.