Los miembros de la brigada de refuerzo contra incendios forestales se desplazó ayer miércoles a la localidad de Pontenova, en Lugo, donde se registraba un fuego, que al cierre de esta edición había destruido unas veinte hectáreas. Las emergencias tuvieron conocimiento del incendio a las tres y veinte de la tarde. En las labores de extinción operaron tres agentes forestales, trece miembros de la brigada y un técnico, con ayuda de cinco camiones motobomba, una pala mecánica, ocho helicópteros y dos aviones. Las brigadas, aunque radicadas en Tineo, pueden ser desplazadas a cualquier punto donde sea necesario.