La asfixia parece ser la causa más probable del fallecimiento del bebé de seis meses el pasado lunes en un hotel de Santiago de Compostela cuando estaba solo en la habitación con su madre. La mujer continúa detenida y custodiada en el hospital al que fue trasladada en estado de "shock". El padre de la pequeña, Raúl Martínez, admitió que practicó un ritual para intentar resucitar a la niña.

La madre, de 34 años, de origen chileno y que vive con su marido en Alemania, se quedó sola con su bebé en el hotel tras mantener una fuerte discusión con su esposo, quien afirmó que estaba en la catedral de Santiago cuando ocurrieron los hechos.

El matrimonio viajó con su hija a la ciudad gallega para participar en el II Congreso Gnóstico Internacional de Antropología. La juez Ana López tomó ayer declaración a cuatro testigos relacionados con el suceso.