La comunidad judía de Asturias está indignada tras los destrozos que ha sufrido el monolito en honor de las víctimas del Holocausto que se encuentra en el Parque de Invierno de Oviedo. Para Aida Oceransky, cabeza de la comunidad hebrea en Asturias, se trata de "un acto vandálico de odio", claramente "judeofóbico", que asocia a la situación que se vive actualmente en Israel, de la que llega a España una visión muy sesgada, según opinó. "Aquí sólo sale que se mata a palestinos, pero se desconoce la realidad: que hay palestinos que están atacando con cuchillos a los judíos y éstos se defienden", explicó.

Al monumento le han arrancado la placa en la que se desea "que nunca vuelva a repetirse" la barbarie cometida por los nazis. El autor o autores del ataque trataron incluso de hacer una pintada, "no les dio tiempo, por lo que no sabemos si se trata de ultras, nazis o de extrema izquierda", indicó Oceransky.

"Es muy doloroso, porque este monolito trata de recordar a los millones de personas que fueron asesinadas. Quien lo ha hecho no sé si entiende el significado de este recordatorio. Desde luego lo han hecho para hacer daño", opinó Oceransky.

Según Oceransky, Oviedo fue la primera ciudad de España que tuvo un monolito en honor de las víctimas del Holocausto. Se instaló en 2005. Desde entonces, el monumento ha sufrido diversos ataques. En 2008, también le arrancaron la placa. Todos los años, el monumento tiene que ser limpiado por los servicios municipales, para que pueda celebrarse, en torno al 27 de noviembre, el homenaje a las víctimas del Holocausto. Al monumento le han hecho de todo, desde pintadas hasta intentar quemarlo. "Algo así no se puede consentir. Siento mucha preocupación, mucha desazón y mucho miedo. Es aterrador que se mezclen así las cosas. Actos así son el caldo de cultivo para cosas aún peores", expresó Oceransky.

La comunidad judía asturiana exige al Ayuntamiento de Oviedo que acometa la reparación del monumento a la mayor brevedad posible, ya que el hecho de que permanezca en ese estado es un insulto a los millones de víctimas de la terrible matanza que se produjo hace siete décadas.