La detonación controlada de una bomba de la II Guerra Mundial descubierta en el aeropuerto de Düsseldorf (Oeste de Alemania) provocó ayer la cancelación de 7 vuelos y el retraso de otros 31. La bomba, de 1.250 kilos, fue detonada por la mañana, después de que los artificieros optasen por seguridad por esta práctica, ya que la desactivación les pareció arriesgada al tratarse de un modelo con un detonador químico-mecánico de efectos retardados.

El explosivo fue detectado en una zona próxima a las pistas de aterrizaje del aeropuerto, según explicó el portavoz del aeródromo de Düsseldorf, Christian Hinkel. Además, indicó que se estableció una zona de seguridad de 500 metros de radio, en la que no están afectados ni edificios del aeropuerto ni bloques de viviendas cercanos.