Agentes de la Policía Nacional detuvieron ayer, en Albacete y en Valencia, a cincuenta miembros de una red dedicada al tráfico de estupefacientes. Durante la investigación se realizaron 39 registros en los que los agentes incautaron casi 92 kilos de marihuana, más de 12 kilogramos de cocaína, 7.756 gramos de precursores y drogas de diseño, 297 gramos de heroína, un subfusil, ocho pistolas, una carabina, tres escopetas y más de 100.000 euros, entre otros efectos.

Según un comunicado policial, la red había fabricado un búnker en una vivienda, al que se accedía a través de una trampilla, con todos los elementos necesarios para cultivar marihuana. Uno de los arrestados realizaba las labores de "químico" dando forma de gominolas a la metanfetamina que posteriormente distribuían.

Las investigaciones se iniciaron a mediados de abril de este año, cuando se tuvo conocimiento de que un hombre que residía en la localidad valenciana de Cheste distribuía metanfetamina en forma de golosinas.

Con las primeras pesquisas se averiguó que formaba parte de un grupo segmentado en varias ramas, que además de vender metanfetamina traficaba con todo tipo de drogas.