Los Mossos d'Esquadra han dejado de buscar al bebé que desapareció el pasado domingo del Hospital de Vall d'Hebrón, a las cuatro horas de nacer, al confirmar que el padre se lo llevó de acuerdo con la madre y porque no existe ninguna denuncia para que traten de localizar su paradero.

La policía catalana activó el pasado domingo un dispositivo de búsqueda, después de que el Hospital advirtiera de que el padre del niño se había llevado al menor, pese a que no se le había dado de alta, dado que necesitaba cuidados médicos por sus escasas horas de vida.

Tras llevar a cabo varias diligencias, los agentes comprobaron que el padre se concertó con la madre para ocultar al menor, que estaba siendo objeto de seguimiento por la Dirección General de Atención a la Infancia y la Adolescencia (DGAIA) ya antes de nacer.

Al confirmar que se trata de una desaparición voluntaria por parte de los padres y que oficialmente no consta ninguna denuncia para que se le localice, ni por parte de la DGAIA, los Mossos d'Esquadra han puesto fin al dispositivo de búsqueda.

La falta de controles médicos del embarazo de la madre disparó las alertas de los servicios sociales, ante el riesgo de que pudiera ser un indicio de una probable falta de atención al niño una vez nacido.