Una joven de 19 años sufrió el pasado día de Navidad un brutal intento de violación en el portal de su casa en Mieres. Estaba esperando al ascensor cuando un joven llamó a la puerta del portal. La joven no desconfió de él y le abrió, al pensar que se trataba de un vecino. Pero no era así. Cuando ambos estaban esperando al ascensor, de forma súbita, se inició una pesadilla de golpes y amenazas para que dejase de gritar y se bajase los pantalones, mientras el agresor arrastraba a la víctima al hueco de la escalera, que no era visible desde la calle. Allí iba a consumar la agresión sexual. El ataque, sin embargo, cesó abruptamente cuando aparecieron unos vecinos del edificio, cuya presencia puso en fuga al presunto violador, sin haber consumado la agresión sexual. Ahora el Grupo Operativo Local de la Comisaría de Mieres ha logrado dar con el presunto autor de este salvaje ataque que dejó a la víctima ingresada en el hospital, dado que presentaba lesiones por todo el cuerpo a consecuencia de los golpes recibidos. El presunto autor de la agresión es sorprendente, ya que se trata de un joven de 29 años, sin antecedentes penales, casado y a punto de ser padre. El joven vive además en la zona donde se produjo el intento de agresión, según la Policía.

No se le hubiera detenido de no haber sido por una misteriosa llamada desde un número oculto realizada a la Comisaría mierense. Los agentes tuvieron que descifrar la llamada para identificar a la persona que la había realizado y después rastrearon las redes sociales, para localizar al sospechoso, que fue identificado tanto por la víctima como por los vecinos que habían ahuyentado al presunto violador. Ante este reconocimiento por parte de la joven y los vecinos, se procedió a la detención del presunto agresor.

Huida precipitada

Cuando se produjeron los hechos, el pasado día de Navidad, en torno a las siete de la tarde, el presunto violador huyó tan rápidamente que los vecinos apenas pudieron aportar a los agentes algún dato sobre su aspecto físico que permitiese avanzar en la investigación de la agresión. Tampoco la joven, que por razones obvias no estaba en condiciones de identificarle tras la lluvia de golpes recibida y los momentos de angustia vividos. El detenido ya ha pasado a disposición del juez de guardia.