"Nunca creí que fuera a salir con vida de aquel lugar viendo cómo estaba el resto de mis compañeros", escribió ayer A. G., uno de los alumnos de "Erasmus" que viajaban en el autocar siniestrado el pasado domingo en la AP-7 en el que murieron 13 de sus compañeras y otros 23 han tenido que ser hospitalizados. Uno de ellos está en estado crítico y otros seis graves. Los Mossos d'Esquadra atribuyen 13 delitos de homicidio imprudente al conductor del vehículo siniestrado, que ayer ingresó en la uci y que, según las primeras investigaciones, pudo haberse dormido al volante.

A. G. dejó mensaje en uno de los ocho libros de condolencias que se encuentran en el vestíbulo del edificio histórico de la Universidad de Barcelona (UB) para honrar y recordar a las víctimas del accidente del domingo. "No tengo palabras para describir lo que ha pasado", afirmó.

Otro de los estudiantes que viajó a Valencia con motivo de las Fallas, en un viaje organizado por Erasmus Student Network (ESN) Barcelona, Alec, explicó que él viajaba en otro autobús, y que, igual que sus compañeros, estaba durmiendo cuando se produjo el accidente. "Cuando supe lo ocurrido, envié un mensaje a un amigo que viajaba en el autocar accidentado y, por suerte, me respondió diciendo que estaba bien", explicó aliviado Alec.

"Sólo por suerte, yo no estaba en ese autobús", podía leerse en otra de las dedicatorias de un libro de condolencias de la UB, donde también hay 13 ramos de flores blancas, uno por cada víctima mortal, y velas encendidas. "La tragedia es muy injusta", se puede leer en el mismo mensaje.

Por su parte, C. R. escribió en uno de los numerosos comentarios publicados en el muro del Facebook del Erasmus Student Network Barcelona, el organizador del viaje: "Éste ha sido un increíble viaje trágico, pero juntos con el apoyo de todos los que nos rodean saldremos adelante".

La mayoría de los viajeros del autocar siniestrado llevaba puesto el cinturón de seguridad con el que estaba dotado el vehículo. La directora general de Tráfico, María Seguí, indicó que, si bien desconoce el número de víctimas mortales que usaban el cinturón, todo indica que algunas de las 13 chicas fallecidas no lo llevaban puesto, ya que salieron despedidas del autobús tras el impacto.

Las primeras investigaciones apuntan a que el conductor del autocar accidentado en Freginals (Tarragona) pudo haberse dormido mientras conducía. El hombre, que sufrió un ataque de ansiedad mientras declaraba ante los Mossos d'Esquadra, dio negativo en los controles de alcoholemia y de drogas que le hizo la Policía catalana. Tanto el consejero del Interior, Jordi Jané, como el ministro de la misma área, Jorge Fernández Díaz, hablaron de un fallo humano.

El conductor había descansado antes del viaje y las víctimas murieron aplastadas al chocar contra el vehículo que circulaba por la otra vía en sentido Valencia, aseguró ayer Raúl López, hijo del dueño de Autocares Alejandro, empresa a la que pertenecía el vehículo accidentado. También insistió en sus declaraciones en que el chofer del autocar era "impecable. Hace más de 30 años que conduce, 17 de ellos con nosotros, y nunca ha habido ningún problema con él".