Un grupo de familiares de las víctimas del avión de Germanwings que estrelló deliberadamente su copiloto, Andreas Lubitz, formalizará una demanda colectiva de indemnización ante la Justicia de Estados Unidos, coincidiendo con el aniversario de esa catástrofe aérea.

Francia conmemora hoy el primer aniversario de la tragedia con una ceremonia que espera reunir a unos 600 familiares de las víctimas mortales.

El abogado de los 34 demandantes, Christoph Wellens, confirmó ayer la inmediata presentación de esa querella contra la escuela de aviación de Lufthansa en Arizona, donde el copiloto cumplió parte de su formación.

Lubitz estrelló el Airbus A320 que cubría el trayecto entre Barcelona (España) y Düsseldorf (Alemania) el 24 de marzo de 2015, tras encerrarse en la cabina aprovechando una ausencia del piloto. Murieron las 150 personas que viajaban en el aparato, en su mayoría alemanes y españoles.

Según las investigaciones, Lubitz había pasado por hasta 40 consultas médicas por diversos trastornos psíquicos y depresiones, tenía tendencias suicidas y el día en que estrelló el aparato estaba de baja, que no había comunicado a sus superiores.

Germanwings, filial de bajo coste de Lufthansa, pagó 50.000 euros en concepto de "ayuda inmediata" a las familias de cada víctima mortal, más otros 25.000 euros de indemnización por cada uno de esos casos. El colectivo de demandantes consideró insuficientes esas cantidades y consideran que pueden obtener unos 5 millones de dólares.