La acusada de haber maltratado a una ovetense de 85 años a la que cuidaba aceptó ayer una condena de nueve meses de prisión, en lugar del año que solicitaba el Fiscal, y a abonar a la víctima una indemnización de 4.000 euros por daños morales. La ahora condenada entró a trabajar en febrero de 2012 en el domicilio de la mujer, que estaba impedida para realizar las actividades cotidianas. Durante meses sometió a la víctima a maltratos físicos de distinta índole, como bofetones, tirones de pelo y empujones. Además, le gritaba y la insultaba, diciéndole cosas como "loca" y "tonta". Esta situación llevó a la anciana a un estado de estrés que propiciaba temor y llantos continuos. Fue su propia hija la que descubrió los hechos más de un año después, en mayor de 2013. De inmediato despidió a la cuidadora que ayer fue juzgada. La condena incluye la inhabilitación especial de sufragio pasivo durante nueve meses y el abono correspondiente a las costas procesales.