La Guardia Civil, junto con policías de 26 países, han detenido en España, Irlanda, Reino Unido, Argentina, México, Brasil, Chile, Alemania y Serbia a trece personas por producción, tenencia y distribución de material de abusos sexuales a menores en Internet.

Se trata de la operación Plus Ultra 2, coordinada por Europol, y entre los arrestados se encuentran dos productores de material de abusos sexual a menores, informa la Guardia Civil.

Asimismo, se han intervenido más de 200.000 archivos explícitos, vídeos y fotogramas en los que se reproducen abusos sexuales a menores desde bebés hasta niños y niñas de 16 años.

Además, archivos creados por los productores con dedicatorias "a la carta" para los solicitantes donde se apreciaban escenas de un elevado contenido de violencia sexual ejercida sobre menores de muy corta edad.

También se han podido identificar a 30 niños víctimas de abusos sexuales y a 21 agresores.

La investigación se inició tras tenerse conocimiento, a través del intercambio de información con la ONG NECMEC (National Center for Missing and Exploited Children) de Estados Unidos, de la existencia de un usuario localizado en Murcia que estaba distribuyendo archivos pedófilos por internet.

Posteriormente, los agentes, tras la autorización judicial pertinente, analizaron el contenido del ordenador de este usuario ahora detenido e intervinieron información que les permitió obtener nuevos indicios sobre la comisión de diversos delitos de índole similar.

Tras analizar esta información se detectaron en diferentes países 551 direcciones de correos electrónicos y más de 80.000 archivos de contenido explícito de abusos sexuales a menores.

Por ello y con la colaboración de Europol y policías de Estados Unidos, Canadá, Irlanda, Letonia, Francia, Grecia, Suecia, Suiza, Alemania, Reino Unido, Dinamarca, Australia, Serbia, Argentina, Indonesia, Israel, Japón, Kenia, Nicaragua, Pakistán, Sudáfrica, Sri Lanka, Ucrania, México, Brasil y Chile, se pudo continuar con la investigación, en la que se detuvo a otras 12 personas.

Cada usuario poseía un perfil en internet a través del cual realizaban la subida de archivos pedófilos, los cuales catalogaban previamente según el tipo al que correspondían (sexo del menor, edad, actividad, etcétera), facilitando el acceso de las personas que deseaban visionarlos.

Por lo general los detenidos extremaban sus medidas de seguridad realizando un control del tipo de perfil de cada usuario para asegurarse que se trataba de personas de similares gustos y tendencias y así evitar ser detectados por los cuerpos policiales de cualquier país.

Utilizaban frases como: "¿Quieres intercambio? Escríbeme. Me gustan niños y niñas de 1 a 9 años. TÚ envías primero o si no NADA, absolutamente. Si quieres buen material, envía buen material. Envíame la contraseña y te envío la mía. No publiques tu contraseña en los comentarios. Disfruta".