El hombre que estaba acusado de arrollar con su coche en un camino vecinal de Oviedo a un agente de la Guardia Civil, ocasionándole lesiones en el antebrazo y en una mano, aceptó ayer una condena de dos años de cárcel, tras reconocer los hechos y llegar a un acuerdo de conformidad en el que se recoge que el ahora condenado actuó bajo los efectos del alcohol y de sustancias estupefacientes, así como la consignación, con anterioridad al juicio, de 5.877 euros para cubrir los daños.

Los hechos se produjeron en 2012. El ahora condenado circulaba a gran velocidad por la autopista "Y", sentido Serín, adelantando a un coche policial e incorporándose bruscamente a la autovía de Oviedo-Villaviciosa, por lo que se inició una persecución. El conductor ignoró las señales para que se detuviera y continuó realizando peligrosos adelantamientos hasta por el arcén. En un momento dado abandonó la autovía A-64 por la salida de Meres y continuó por la carretera N-634 en las mismas condiciones y saltándose todas las limitaciones de velocidad y los semáforos en rojo en Colloto.

Posteriormente accedió a Parque Principado (ahora Intu Asturias), donde provocó el caos. Un agente de la Guardia Civil procedió a interceptarle, pero el conductor le intentó embestir. En su huida accedió a un camino vecinal (Folgueras-Oviedo), donde rebasó las barreras de un paso a nivel pero quedó bloqueado por otro coche. Llegó entonces el agente, al que arrolló al intentar huir. Fue detenido por otro guardia civil.