Una niña de 13 años falleció la semana pasada al caer del balcón de su domicilio, en un segundo piso del municipio de Ciempozuelos (Madrid). La joven trataba de escapar del piso donde residía con sus padres para salir de fiesta. Sus progenitores le habían prohibido abandonar esa noche la casa. Fue entonces cuando la chica optó por precipitarse al vacío, sufriendo heridas muy graves. Eso sucedió a las 23.30 horas del pasado viernes día 14. La menor, que fue trasladada al hospital Gregorio Marañón por una ambulancia, acabó muriendo dos días después. La Guardia Civil da por cerrada la investigación ya que considera que el suceso fue accidental.
Todo ocurrió en las fiestas patronales de San Isidro, que celebra la localidad de Ciempozuelos. Ese día estaban programados varios conciertos de música. Según fuentes de la investigación, los padres de la fallecida no le dieron autorización a la chica para salir de fiesta e incluso le cerraron con llave en casa.
La reacción de los progenitores sentó muy mal a la niña, que decidió colgarse del balcón de su vivienda. Lo hizo con sumo cuidado, algunos apuntan que intentó ayudarse de alguna prenda para llegar sana y salva a la calle. Sin embargo no fue así. La menor acabó cayendo al suelo desde una altura de unos cinco o seis metros, según fuente de la Guardia Civil.
