Catorce personas murieron, entre ellas cinco niños y un bebé, al caer un autobús escolar a un canal de riego en la provincia de Osmaniye, en el sureste de Turquía. En el accidente, ocurrido el domingo por la noche, resultaron heridas otras 26 personas, una de ellas muy grave.

En el siniestro también fallecieron un profesor, el conductor del vehículo y seis padres que acompañaban a los niños, que iban de excursión.