La Policía, junto con gendarmes franceses y agentes paraguayos y funcionarios de la Agencia Tributaria en Navarra, con el apoyo de una oficina móvil de Europol, han desarticulado un complejo entramado de carácter internacional dedicado a la captación de mujeres de origen sudamericano para su posterior explotación sexual. La operación ha permitido la detención de nueve personas y la liberación de las mujeres explotadas. La investigación empezó a finales del pasado año a partir de la llamada de las víctimas al teléfono 900 10 50 90 que la Policía ha habilitado para la atención de las mujeres víctimas de trata. Los agentes descubrieron una organización en torno a un clan familiar. Las mujeres eran captadas principalmente en Paraguay y luego trasladadas a Europa donde eran obligadas a prostituirse en pisos y locales de Pamplona, Nantes y La Roche-Sur-Yon (Francia).