Un matrimonio acusado de la muerte de un niño de 3 años, al que cuidaba en Marbella (Málaga) y que fue objeto de "reiterados malos tratos y continuas palizas", reconoció ayer los hechos y pidió perdón.
Los acusados admitieron que no le llevaron al hospital pese a los fuertes dolores que padecía a consecuencia de una peritonitis provocada por los golpes continuos que recibía en el abdomen. El fiscal pide 15 años para cada acusado y 120.000 euros para la madre, marroquí. Cuando el niño murió en mayo de 2014 sufría desnutrición. Habían convenido con la madre en que cuidarían al niño por 300 euros al mes. Cuando la mujer dejó de pagar, los malos tratos se recrudecieron.
